Gerardo D. Cristiante: el trazo rebelde

Desde el 3 de febrero se puede visitar la nueva exposición temporal que presenta la sala de exposiciones de la Cámara de la Propiedad Urbana de Gerona, titulada El Trazo Rebelde, de Gerardo D. Cristante (Buenos Aires, Argentina, 1979).

La caligrafía japonesa, como arte moderno, es el impulso contemporáneo del movimiento Art Shodō de Japón tras la revolución de la abstracción caligráfica liderada por el grupo de calígrafos de vanguardia llamado Bokujinkai a mediados del siglo XX. Un diálogo de diez años con el informalismo europeo y la abstracción americana fue suficiente para transformar la historia del arte. Yuichi Inoue, con sus obras de un solo kanji, se introdujo de lleno en el panorama artístico mundial.

Las obras que se presentan en esta exposición, que podrá visitarse hasta el 28 de febrero, se inspiran en este movimiento y en el universo del kanji, aunque no pretenden alcanzar su legibilidad, sino poner de manifiesto la cruda presencia del trazo. Toda la obra del autor se puede leer como un amoroso elogio a la poca traza, un trazo torpe que cultiva como un gesto de auténtica rebeldía ante el acabado, el perfecto, el limpio, lo sublime, lo controlable, lo premeditado. Haciendo uso de elementos cotidianos, como estropajos de acero o estropajos naturales como el arbusto cola de zorro, entre otros, encontrados en sus paseos por el Valle de Llémena para fabricar sus propios pinceles, se aleja de la pericia y de la zona de confort que la familiaridad arte del trazo.

Asumiendo la premisa filosófica de Morita Shiryuu, que afirma que la caligrafía recoge el movimiento dinámico de la existencia, el autor explora la interioridad de lo que llama el “trazo rebelde”. Mediante una vez veloz, sin pensar, huyendo de los artificios y aceptando la naturaleza líquida de la tinta como reflejo de la vida, conecta con la humildemente de principiante de la tradición zen y con la interioridad concreta del trazo, que no acepta correcciones, que ama “el error”, la imperfección, el misterio y el azar. Cada kanji es un universo en sí mismo, un nudo de significaciones que se abre al gesto que le penetra y lo resignifica para devolverlo al mundo en un relato siempre contemporáneo.

Gerardo D. Cristante vive actualmente retirado en el Valle de Llémena (Girona). Durante su trayectoria profesional ha pasado por el mundo del espectáculo, la dramaturgia, la poesía, la fotografía, la danza, el teatro, entre otras disciplinas. Su encuentro con el artista Mihoko Ono en la Casa Asia de Barcelona le marcó profundamente, sobre todo cuando éste llevó a cabo una performance de caligrafía. En ese momento, Cristante decidió abandonar el sector de las artes escénicas para dedicarse al estudio del Arte Shodō durante cinco años con Mihoko Ono. Más adelante, fundó Acashodo, la Asociación Catalana de Caligrafía Japonesa, junto a otros artistas.