'Especies mensajeras': reflexiones sobre la contaminación y la naturaleza mutante

En un mundo donde la vida se ve forzada a adaptarse a las fuerzas incontroladas de la contaminación, 'Especies Mensajeras', del artista Álvaro Soler-Arpa , nos invita a contemplar un futuro tan fascinante como inquietante. En este escenario, la naturaleza, pervertida y transformada, se ajusta de forma extraña y mutante a un entorno contaminado. Sus esculturas nos hablan de animales imposibles, fruto de mutaciones genéticas fuera de control, que se convierten en un reflejo distorsionado de nuestro impacto destructivo sobre el medio ambiente.

La muestra se podrá visitar en la sala Goya del Círculo de Bellas Artes de Madrid desde el 9 de octubre hasta finales de enero de 2025, representando una síntesis de más de catorce años de trabajo del artista.

Inspirándose en los principios de la evolución y jugando con los límites entre lo real y lo imaginario, Soler-Arpa presenta criaturas que parecen surgir de un ecosistema distópico. Elefantes con plumas, reptiles cubiertos de pelo, anfibios rumiando o lacerías bicéfalas desafían nuestra comprensión de lo posible. Estas esculturas, con formas tortuosas pero elegantes, nos llevan a reflexionar sobre la destrucción de la biodiversidad causada por la contaminación y el cambio climático. La belleza iridiscente que provoca la radiactividad en sus pelajes contrasta con la tragedia de una naturaleza profundamente alterada por la ambición humana desmedida.

Álvaro Soler-Arpa al seu taller.

Las obras de Soler-Arpa son poderosas metáforas del futuro que estamos construyendo. Peces contaminados con mercurio y animales de un tercer sexo con formas innovadoras son manifestaciones del desastre ecológico inminente. Según el artista, este distanciamiento de la naturaleza simboliza la pérdida de nuestra propia espiritualidad, un vacío que nos aleja progresivamente de nuestro entorno natural, y que él denuncia a través de sus esculturas.

Álvaro Soler-Arpa, nacido en Girona en 1974, es un artista que combina su formación en anatomía y dibujo con una profunda fascinación por las formas orgánicas. Tras una carrera en publicidad y cine, donde colaboró con directores como Woody Allen o Alejandro González Iñárritu, se dedicó plenamente a las artes visuales, centrándose en la creación de esculturas e instalaciones. Su obra mantiene una conexión evidente con la naturaleza, denunciando la devastación provocada por el ser humano y mostrando gran interés por las consecuencias de la contaminación en el mundo que nos rodea.

En esta exposición, comisariada por Marian Boadas y apoyada por la Fundación Lluís Coromina, Greenpeace y la Plastic Pollution Coalition , las esculturas de Soler-Arpa nos invitan a repensar nuestra relación con el mundo natural. En un momento crucial para la biodiversidad, su arte se convierte en un grito de alerta sobre la fragilidad de nuestro ecosistema y la urgencia de cambiar nuestros hábitos de vida y consumo. Sus criaturas, aún siendo ficticias, se convierten en mensajeras de un futuro que todavía podemos evitar, siempre que asumimos nuestra responsabilidad colectiva hacia el medio ambiente.

'Ojos', Álvaro Soler-Arpa