Como un toro a punto de enfrentarse al destino, Albert Serra ha entrado en la arena del cine con 'Tardes de soledad', una obra que desde su primera proyección se presentaba como candidata a ganadora, un reflejo de un cine valiente e incisivo que sólo unos pocos se atreven a hacer. Este sábado, la Concha de Oro ha sido su recompensa, confirmando que su camino, tan polémico como sublime, ha encontrado el éxito en la 72 edición del Festival de San Sebastián. Su mirada sobre la tauromaquia, una práctica que despierta pasiones y críticas por igual, ha llevado a Serra a explorar no sólo el mundo de los toros, sino los límites mismos del arte.
La proyección de 'Tardes de soledad' cautivó desde el primer momento, y no es casual que el jurado, presidido por Jaione Camborda, la haya escogido por su originalidad y coraje. Una película que no se limita a mostrar la fiesta taurina, sino que se adentra en el alma de sus protagonistas, como el joven torero Andrés Roca Rey, al que sigue de cerca durante las corridas, captando la tensión, el miedo y la masculinidad que rodean a este mundo. El filme de Serra no sólo trata sobre el toreo, sino sobre la tradición, la violencia y la condición humana, elementos que el director de Banyoles sabe transformar en poesía visual.
Con este premio, Serra se une al club de cineastas catalanes que han triunfado en San Sebastián, siguiendo los pasos de Isaki Lacuesta, que ya ganó la Concha de Oro en dos ocasiones, con 'Entre dos aguas' (2018) y 'Los pasos dobles' (2011).
'Tardes de soledad' es una obra monumental que verá la luz en los cines a principios del 2025. Albert Serra, conocido por su estilo provocador, ha sabido defender su propuesta ante las críticas, como la polémica que suscitó el PACMA, pidiendo la retirada del documental por su visión humanizada de una práctica que consideran violenta. Lejos de apartarse, Serra ha abrazado la controversia y ha reivindicado la capacidad del cine para profundizar en la realidad con toda su complejidad. "El cine de autor tiene esa capacidad de ir hasta el final de cualquier cuestión", ha declarado Serra.
Además del prestigioso galardón principal, el filme ha sido reconocido con el Premio Feroz, otorgado por la Asociación Española de Informadores Cinematográficos. Serra se perfila así como una voz imprescindible dentro del cine contemporáneo, un creador que no teme explorar territorios peligrosos, tanto artísticos como éticos.
El triunfo de Albert Serra es el reconocimiento a un cine arriesgado que, con cada paso, cuestiona el mundo que le rodea y, de rebote, al espectador que se atreve a mirarlo de frente. Esta Concha de Oro no es sólo un trofeo; es la culminación de una carrera dedicada a romper esquemas, a hacernos reflexionar sobre los límites del arte y la realidad, ya invitarnos a una danza peligrosa con la verdad, como hace un torero con la muerte delante .
Explorando los límites de la creatividad heterodoxa de Albert Serra