Rosa Cortiella regresa con su nueva exposición 'Ofrendas y Mutaciones' a la galería Juan Naranjo de Barcelona, donde se refleja su profunda conexión con la naturaleza y la capacidad para explorar sus dos caras más esenciales: la fuerza y la fragilidad. La artista, conocida por su trayectoria en el mundo de la cerámica contemporánea, nos presenta una selección de obras que sintetizan sus últimos años de investigación, con especial énfasis en el color y el volumen como lenguajes expresivos.
A través de la cerámica, Cortiella consigue que el color vaya más allá de la simple decoración, convirtiéndolo en un elemento que transforma y libera la materia. Este tratamiento del color se complementa con un uso innovador del volumen: la yuxtaposición de esculturas de grandes dimensiones con otras más delicadas genera un diálogo visual que subraya las dualidades inherentes a la naturaleza.
Las esculturas expuestas plantean una profunda reflexión sobre el equilibrio de fuerzas que gobierna el mundo natural. Por un lado, las formas más robustas y abultadas simbolizan la potencia indómita de la naturaleza, su capacidad de regenerarse y manifestarse con fuerza. Por otro lado, las piezas más pequeñas y detalladas captan la sutileza y fragilidad de la vida, evidenciando que, pese a su aparente debilidad, esta fragilidad sostiene todo un ecosistema complejo.
Este contraste entre fuerza y delicadeza, entre la brutalidad y la sutileza, es uno de los temas centrales de la exposición. Cortiella nos muestra cómo el arte puede ser un vehículo poderoso para expresar estas tensiones y ofrecer nuevas perspectivas.
La carrera de Rosa Cortiella, iniciada en 1988, ha estado marcada por una constante búsqueda de nuevos lenguajes creativos dentro del mundo de la cerámica. Además de su trabajo como escultora, ha desarrollado proyectos en otros ámbitos, como el diseño de prendas para la gastronomía, siempre con un enfoque multidisciplinar que la caracteriza.
La exposición 'Ofrendas y Mutaciones', que se podrá visitar hasta el 11 de octubre en la galería Juan Naranjo de Barcelona, es una oportunidad única para adentrarse en el mundo creativo de Rosa Cortiella.