El Museo de la Escala Alfolí de la Sal se convierte en escenario de una exposición imprescindible para los amantes del arte contemporáneo: 'Bon à tirer', una selección de grabados de Antoni Tàpies que pertenecen a la colección de la Fundación Villa Casas. Esta muestra ofrece una oportunidad única para acercarse al universo creativo de uno de los artistas más relevantes del siglo XX, no sólo en la pintura, sino también en su obra gráfica, a menudo menos conocida.
Los grabados que se exhiben fueron realizados entre 1989 y 1993 en el taller de Joan Roma, uno de los estampadores más reconocidos de Barcelona. Este período de su carrera representa un momento de plena madurez artística, donde Tàpies había consolidado su lenguaje visual y simbólico. Los grabados, que forman parte de una colección adquirida en 2017 por la Fundación Vila Casas, son especialmente significativos por su distinción de buen à tirer (BAT), término francés que significa “válido para estampar” y que designa la pieza modelo utilizada para la producción del resto de la edición. Esta distinción aporta un valor especial a las obras, puesto que nos acerca a la versión más pura y definitiva que el artista consideraba óptima.
La muestra, que podrá visitarse hasta el 1 de diciembre y comisariada por Natàlia Chocarro, explora la vertiente más técnica y espiritual de la obra de Tàpies. A través de esta selección de treinta grabados, se hace evidente el interés del artista por la materialidad de sus composiciones, aspecto que supo combinar magistralmente con su profunda sensibilidad y espiritualidad. Su obra se nutre de una estética particular que fusiona el mundo cotidiano con una dimensión más metafísica y trascendente, marcada por su influencia del budismo zen. Este diálogo entre lo terrenal y lo sagrado impregna su obra, y esto se hace especialmente evidente en sus grabados, donde elementos como cifras, cruces, grafitos y objetos domésticos se convierten en símbolos universales de la condición humana.
'Petjades i creus', Antoni Tàpies
Los grabados de esta muestra no sólo son un reflejo de su interés por las posibilidades técnicas del grabado, sino que también revelan sus obsesiones temáticas, profundamente arraigadas en una constante reflexión sobre el dolor, la muerte y la condición existencial del ser humano.
Chocarro subraya que la colaboración con Juan Roma fue fundamental para la evolución de Tàpies en el mundo del grabado, un campo que el artista supo explorar con la misma dedicación que en otras disciplinas artísticas. Esta relación profesional permitió a Tàpies ampliar las posibilidades expresivas del grabado, experimentando con texturas, materiales y técnicas que aportan a sus obras un carácter único.
El centenario del nacimiento de Antoni Tàpies es una ocasión especial para revisar y celebrar su trayectoria artística. Con la exposición 'Bon à tirer', la Fundación Vila Casas rinde homenaje a un artista que llevó el arte catalán a la escena internacional, destacando su capacidad de innovar sin abandonar las raíces de una tradición pictórica. Esta muestra no sólo es una oportunidad para gozar de su obra, sino también para comprender mejor su proceso creativo, su pensamiento y el legado que ha dejado.
'T i vernís', Antoni Tàpies