Cristina Mejías, artista visual de Jerez de la Frontera, emerge como la figura central del Año 13 de la Viña de los Artistas en La Pobla de Cérvoles, con su obra titulada Otro es el río que persigo. Esta semana, la obra ha estado meticulosamente integrada entre las cepas y olivos del Mas Blanch y Jové.
La Vinya dels Artistes, ideada por Josep Guinovart e inaugurada en 2009, es una galería de arte a cielo abierta situada en la bodega Mas Blanch i Jové. Este año celebra su decimocuarta edición y ya cuenta con una colección permanente de 17 obras de artistas como Joan Brossa, Carles Santos, Frederic Amat y Susana Solano, a las que se añadirá el conjunto escultórico de Cristina Mejías a partir del 6 de Julio, ampliando así su legado artístico.
La obra de Mejías consiste en un conjunto de esculturas metálicas que coexisten armoniosamente con el paisaje rural de Les Garrigues. Destacan cuatro estructuras que, escondidas cerca de una pequeña meseta, emergen de la tierra y se mueven con la dirección del viento. La obra se enriquece con un conjunto de arcos y tallos individuales terminados en puntas, hojas o espejos.
El título Otro es el río que persigo es una referencia literaria tomada del cuento El inmortal de Jorge Luis Borges, una reflexión profunda sobre el tiempo, la eternidad, el conocimiento y la esencia de la humanidad.
Mejías ha destacado la importancia de la integración de su obra con el paisaje natural, eligiendo una ubicación fuera de los itinerarios convencionales de la finca. Los visitantes siguen un camino que imita el curso de un río, observando y escuchando la prenda desde la distancia. El proyecto está concebido como una instalación coral donde cada componente tiene un papel definido. La intención de Mejías es que su obra actuó como una caja de resonancia capaz de captar la esencia del entorno, ofreciendo una experiencia visual y sensorial inmersiva para los visitantes.
La participación en la Viña de los Artistas ha supuesto para Mejías una experiencia enriquecedora, permitiéndole compartir el espacio con otros reconocidos artistas como Eva Lotz y Susana Solano.
Joan Jové, el herrero encargado de materializar la visión del artista, ha jugado un papel fundamental en la creación de la obra. Como parte de la Viña de los Artistas, Jové es responsable de la fabricación de las piezas expuestas, asegurándose de seguir las directrices del artista sin afectar al patrimonio natural de la finca.
Jové ha destacado los retos técnicos que ha implicado el proyecto de Mejías, desde la interpretación de su punto de vista creativo hasta la ejecución de las piezas, incluyendo el anclaje al suelo para resistir rachas de viento de hasta 100 km/h. Para las cuatro piezas centrales de la instalación, se utilizaron más de tres kilómetros de flejes de acero, dispuestos en múltiples capas para garantizar su estabilidad.
La obra será presentada al público el 6 de julio en el espacio artístico de la bodega Mas Blanch i Jové en la Pobla de Cérvoles.