El Instituto de Cultura de Barcelona ha adquirido el fondo del fotógrafo Humberto Rivas (Buenos Aires, 1937- Barcelona, 2009), culminando así un proceso que debe garantizar la conservación y difusión de la obra del autor argentino, establecido en la ciudad desde el año 1976. Con la compra, el Ayuntamiento evidencia el reconocimiento de la importancia de Humberto Rivas en el relato de la fotografía contemporánea barcelonesa, y se materializa la voluntad de la familia para que el fondo continúe en la ciudad en la que el autor pasó más de la mitad de su vida. La trayectoria creativa de Rivas fue reconocida con premios como el Premio Nacional de Fotografía (1997), el Premio de Artes Plásticas del Ayuntamiento de Barcelona (1997) y la Medalla de Oro al Mérito Artístico (2009); la plaza trasera del Centro Cívico Can Basté, donde daba clases, lleva su nombre.
El fondo adquirido comprende un conjunto integrado por 23.193 negativos, placas y diapositivas de distintos tamaños, así como los contactos; 6 maquetas de fotomontajes; 200 tiradas originales realizadas por Humberto Rivas que representan los temas que caracterizan la obra del autor (personajes de Cataluña, retratos, bodegones, fachadas de comercios decadentes, paisajes urbanos nocturnos y diurnos…) y un lote de documentación textual, la mayor parte compuesta por apuntes preparatorios para las clases que impartía, pero también recortes de época y de otros documentos personales, entre ellos la correspondencia con el fotógrafo y diseñador America Sánchez, también argentino, que le animó a instalarlo se en la ciudad. Buena parte de este fondo estaba ya depositado en la AFB en régimen de comodato; fue trasladado en 2017 por la familia del fotógrafo a raíz de una inundación en el domicilio de Rivas, con la voluntad de garantizar su conservación.
Humberto Rivas es autor de gran relevancia para la fotografía catalana contemporánea. Su llegada a Barcelona en 1976, durante la Transición y poco antes del golpe de estado de Videla en Argentina, facilitó la renovación de las retóricas fotográficas y el reconocimiento de autores más jóvenes que no se ceñían al documental estricto. Rivas sacudió ese tributo al realismo con su mirada vanguardista y su convicción del potencial artístico de la fotografía. La singularidad de su fondo no es sólo también fotográfica, sino histórica.
Autor prolífico, cultivó con especial interés dos grandes temas, el retrato y el paisaje. Rivas retratista trabajaba bajo la premisa de capturar a la persona tras el personaje, interesado tanto en personas anónimas como en las grandes personalidades de su tiempo. Su arraigo en Barcelona coincidió con el afloramiento de personajes ligados a la política y cultura catalanas. Los fotografió a la par que crecía su renombre. El Rivas paisajista se define por la predilección por los espacios urbanos decadentes y vacíos, con la voluntad de hablar de la presencia desde la ausencia. En uno de los últimos proyectos de su trayectoria, Rivas siguió las huellas físicas de la Guerra Civil en Cataluña. Huellas, como se titula este trabajo, formaba ya parte del patrimonio fotográfico municipal. En 2009, el Ayuntamiento de Barcelona compró la serie, integrada por 53 tiradas fotoquímicas realizadas por los laboratorios Sabaté bajo supervisión del mismo autor. En 2016 se expuso en la sala de la AFB y se editó un catálogo.
La conservación del fondo Humberto Rivas en el Archivo Fotográfico de Barcelona facilitará el estudio de este autor, ya que aparte de las tiradas los estudiosos podrán consultar toda la documentación y las maquetas. El ingreso definitivo de este fondo supone un paso importante en la consolidación de la AFB como espacio de referencia en la conservación, custodia y difusión del patrimonio fotográfico de la ciudad.