La Fundación Girona Este ha estrenado un nuevo equipamiento para la ciudad, una casa de los años setenta totalmente reformada en Mas Ramada será la nueva sede de la Casa de las Artes , un espacio que “quiere unir la ciudad que ignora el barrio y el barrio que ignora la ciudad”, explica el presidente de la fundación, Jaume Sanabras. La iniciativa es cien por cien privada y también albergará la sede de la asociación Azahara.
A la presentación, que tuvo lugar el 18 de octubre, asistieron cuatro concejales del equipo de gobierno, encabezados por la vicealcaldesa y concejala de Promoción Económica, Gemma Geis (Juntos), y el concejal de Cultura, Quim Ayats ( ERC); el representante de la Diputación de Gerona, Jordi Camps, y la delegada de la Generalidad, Laia Cañigueral. "Esta iniciativa ayuda a cubrir el vacío que hay en Cataluña en materia de disciplinas como música, cocina o arquitectura y recuerda el campus de las Artes de Can Ricart en el Poble Nou, en Barcelona", dijo Geis.
A corto plazo, la Casa de las Artes es la sede de la fundación, que cuenta con 56 miembros, la gran mayoría empresas. Bonart Cultural es también una de las entidades que colabora en este proyecto . La casa dispone de salas de trabajo, una gran sala multiuso y un espacio exterior donde se pueden realizar “exposiciones, presentar libros o actuaciones musicales”, detalla el gerente de la entidad, Bernat Rubió. La voluntad es que el edificio sea un punto para residencias de artistas y creación de productos audiovisuales, tal y como expuso Ricard Planas, ceo de bonart cultural y un miembro del patronato de la fundación Girona Este, en la inauguración.
La fundación lleva trabajando desde hace más de tres años. Vela por ayudar a las familias de los barrios a acceder a más oportunidades. Su personal y sus colaboradores hacen posible que haya actividades de dibujo, de refuerzo educativo o de mentoraje con beca, entre otros. Con datos de octubre de 2021, en los barrios de Vila-roja, Mas Ramada, Creueta, Grupo Sant Daniel y Font de la Pólvora vivían 4.200 personas.
Con el trabajo en red de las empresas de la fundación y de otros colaboradores, el nuevo equipamiento será la sede de la entidad Azahara, y “el cuartel general de Ciudad policromada ”, un proyecto que pretende cambiar la estética de equipamientos del sector.
Recientemente el activista plástico y dibujante Aleix Font Arroyo ha pintado la propia Casa de las Artes y guió una actuación hace unos meses en la escuela de Vila-roja, en la que alumnos de 3º y 5º ayudaron a definir cómo debía ser la pintada de la escuela. Es de alguna manera una réplica de una iniciativa que crece cada año en los barrios de Can Gibert y Santa Eugenia de Ter con el festival Monart.