El arte textil de Josep Grau-Garriga

El arte textil de Josep Grau-Garriga está asociado al resurgimiento del tapiz contemporáneo ya su reivindicación como territorio plástico autónomo.

El arte textil de Josep Grau-Garriga (Sant Cugat del Vallès, 1929 - Angers, Francia, 2011) está asociado al resurgimiento del tapiz contemporáneo ya su reivindicación como territorio plástico autónomo. Fue a finales de los años cincuenta que en París –en el taller de Jean Lurçat– descubrió sus revolucionarias posibilidades de expresión, que materializó en la planificación y dirección de la Escola Catalana del Tapís , un centro innovador nacido a partir del sustrato textil de la antigua fábrica de tapices Aymat, de Sant Cugat del Vallès. Conectado sensiblemente con sus orígenes, es en su población nativa donde se vincula con la naturaleza y descubre los materiales más humildes y las materias en bruto para recoger la presencia de la tierra, uniendo arte y vida a través de la materia.

Un artista textil con mirada independiente.

Auténtico pionero en la renovación de esta disciplina, la integración de técnicas, materias y lenguajes –interconectados a partir de un mismo concepto estético–, así como su actividad multidisciplinar hacen de Josep Grau-Garriga un artista independiente y atrevido, de profundas intencionalidades, que podemos calificar de creador global. Tapiz, pintura, dibujo, escultura y environamiento conformaron sus escenarios creativos, fijando su observación en las raíces, la memoria, la naturaleza, el contexto social y la mirada autobiográfica.

En la práctica de su obra environamental y en la ocupación tridimensional del espacio con montajes e instalaciones, incorpora la lección del arte conceptual y efímero. Estos envoltorios se basaban en composiciones y estructuras textiles que ocupaban el espacio e interpelaban al espectador, que se convertía en partícipe de la obra por el hecho de habitarla.

Exposición Josep Grau-Garriga. Diálogo de luz

La instalación variable Diálogo de luz (1986-1988) que presenta el MACBA se centra en la diseminación del arte del tejido. Se han recuperado tres grandes tapices que configuran una única obra y que Grau-Garriga elaboró entre 1985 y 1988 durante la etapa que investigaba las transparencias y sombras proyectadas. La adaptó a diversas arquitecturas, entre ellas la que realizó por primera vez de forma conjunta en el Palau Robert en 1988. Además, incluye una serie de fotografías del proceso de creación, documentos y dibujos de diferentes environamientos realizados por el artista. Se trata de un proyecto de Núria Montclús y Esther Grau, en colaboración con Àlex Castro y Alba Clavell.

Diálogo de luz es la primera de una serie de propuestas de investigación y exhibición impulsadas por el museo, que quiere rescatar prácticas y agentes relevantes dentro de la escena local e internacional y que no siempre han sido suficientemente reconocidos y, en algunos casos, han quedado fuera del relato contemporáneo. Asimismo, quiere reivindicar técnicas relegadas por la historiografía tradicional tratadas como arte menor.