2023 es el año Picasso en conmemoración del 50 aniversario de su muerte. Bajo el rótulo Celebración Picasso 1973-2023, se han programado diversas actividades.
Icono del arte del siglo XX y primera celebrity de la vanguardia, Pablo Picasso es probablemente el creador contemporáneo que ha suscitado mayor atención entre investigadores, comisarios, museos y otras instancias culturales. Cuando parece que ya está todo dicho sobre su persona y que ya no quedan zonas oscuras por iluminar de su trabajo, este año 2023 se consagra enteramente a revisitar su figura con ocasión de la conmemoración del quincuagésimo aniversario de su fallecimiento. Bajo el rótulo Celebración Picasso 1973-2023, se ha programado una nutrida agenda de actividades, que incluye una cincuentena de exposiciones y la celebración de un simposio internacional sobre el artista, en museos e instituciones de Europa y Estados Unidos; el grueso de las efemérides se concentra en España y Francia, patrias de nacimiento y adopción del malagueño. Aunque las propuestas son de ambición y alcance muy diversos, cabe destacar el esfuerzo de coordinación realizado por la comisión franco-española encargada de organizar el evento. Frente a las reservas y suspicacias de los más recelosos, este año Picasso nos ofrecerá sorpresas. Si hacemos un repaso rápido de la programación, una parte significativa de las muestras se dedica a revisar determinadas etapas de la obra picassiana, desde su período de formación (Museo de Belas Artes da Coruña) o sus inicios en París (The Solomon R. Guggenheim Museum, Nueva York) hasta sus últimos años (Fondation Beyeler, Basilea; La Casa Encendida, Madrid), pasando por momentos decisivos de su trayectoria, como Picasso 1906: la gran transformación (MNCARS, Madrid) o Picasso en Fontainebleau (MoMA, Nueva York). Con este mismo planteamiento historiográfico, otra gran línea de exposiciones analiza los distintos lenguajes y medios de expresión que frecuentó el artista: la escultura (Museo Picasso, Málaga), la cerámica (Musée Magnelli, Vallauris) o el dibujo y el grabado (Centro Pompidou, París). O bien ponen el foco en géneros, motivos o series, como las propuestas del Mint Museum de Charlotte (el paisaje) o del Hispanic Society Museum (La Celestina) y The Met Museum de Nueva York (Picasso: un encargo cubista en Brooklyn ).
Artista proteico
Picasso, artista proteico y auténtico genio del transformismo, no sólo fue traspasando estilos y tendencias, fagocitando influencias y reinventándose a cada paso, sino que también buceó en el gran almacén de la tradición, confrontándose con los grandes maestros. Al margen de la impronta de Poussin y del clasicismo francés en el pintor cubista (Musée de Beaux-Arts, Lyon), la mayor parte de las muestras indagan en el legado de la escuela española: El Greco (Museo del Prado, Madrid) ), Velázquez (Casa Velázquez, Madrid) y Goya (Musée Goya, Castres). Entre los diálogos con artistas contemporáneos, Julio González, Pablo Picasso y la desmaterialización de la escultura (Fundación Mapfre, Madrid) explora la colaboración entre ambos creadores en el marco de la invención de la escultura en hierro, mientras que Miró - Picasso (Museo Picasso de Barcelona, Fundació Joan Miró) reconstruye la relación entre los pintores y sus lazos con Barcelona. Más allá de artistas o estilos, exposiciones como Picasso y la abstracción (Musées Royaux de Beaux-Arts, Bruselas) o Picasso y la prehistoria (Musée del Homme, París) nos invitan a descubrir nuevas constelaciones de referencias en la producción del pintor.
Pablo Picasso, L’acròbata, oli sobre llenç, 1930.
Revisión del mito
Con una decidida voluntad revisionista, El cubismo y la tradición del trompe-l'oeil (The Met Museum, Nueva York) desmonta varios de los tópicos construidos por la historiografía en torno al binomio cubismo-pintura ilusionista. También Picasso. Lo sagrado y el profano (Museo Thyssen-Bornemisza, Madrid) propone una relectura de la obra picassiana a partir de los géneros tradicionales. Las complicidades que Picasso tejió con los marchantes y coleccionistas merecen la atención de algunas muestras que profundizan en su relación con su primer galerista, Daniel-Henry Kahnweiler (Museo Picasso, Barcelona), o con su gran mecenas, Gertrude Stein (Musée du Luxembourg, París).
Perspectiva feminista
Picasso y su mujer, Picasso y sus mujeres. No podía faltar, en la era del empoderamiento, el #metoo y la cultura woke, una perspectiva feminista. Así, varias exhibiciones rescatan y reivindican el papel de algunas de las amantes y esposas del pintor: Fernande Olivier (Museo de Montmartre, París) y Fernande junto a Françoise Gilot (Kunstmuseum Pablo Picasso, Münster). Al margen de sus parejas, otras creadoras como Coco Chanel, en el contexto de sus colaboraciones con el artista, son el tema de exhibiciones como la del Museo Thyssen de Madrid. Desde la óptica de los actuales estudios de género, Picasso y el feminismo (Brooklyn Museum, Nueva York) se centra directamente en la “cuestión femenina” en un artista que en ocasiones ha sido calificado de Don Juan, misógino o maltratador. Fuera de cualquier marco, quedan las intervenciones de la videoartista Sophie Calle y del diseñador Paul Smith en las colecciones del Musée Picasso de París. En resumen, un menú en la carta de cualquier paladar.