Dos obras de gran formato, creadas exclusivamente para el Castell de Vila-seca (Tarragonès), lideran la exposición La poética del gesto del artista sabadellense Agustí Puig. La muestra, que podrá visitarse hasta el 17 de septiembre, recorre las principales temáticas del autor como son el paso del tiempo o la condición fugaz del ser humano. Lo hace a través de la cerámica, la escultura, el grabado o el dibujo. Se exponen unos sesenta obras, la gran mayoría de nueva creación. Con esta son ya cinco las exposiciones que el equipamiento ha acogido de la mano de la Fundación Vila Casa, fruto del convenio que firmaron a finales del 2019 y que han revalidado a principios de este año.
Desde que las exposiciones del Castillo de Vila-seca van de la mano de la Fundación Vila Casa, el equipamiento ha recibido a cerca de unos 27.000 visitantes, según ha asegurado la concejala de Cultura del Ayuntamiento de Vila-seca, Manuel Moya . De ellos, un 36% son visitantes locales, un 51% provienen de Cataluña, un 11% del resto de España y un 3% son extranjeros.
A partir del 24 de marzo, el trabajo conjunto sigue y lo hará a través de la exposición del artista sabadellense Agustí Puig. Además, Moya ha destacado que es la primera vez que Puig muestra sus obras en el Camp de Tarragona. Por su parte, la comisaria de la exposición, Natàlia Chocarro, ha destacado que los sesenta piezas de la obra 'La poética del gesto' no tienen nada que ver con las primeras creaciones del artista.
"Si bien la obra que conocemos de Agustí Puig en sus inicios era una obra más sinuosa y contenida, en los últimos años vemos un trabajo, prácticamente, de deconstrucción de la obra del arte", ha señalado. La comisaría también ha subrayado que el artista utiliza, incluso, una sierra mecánica para elaborar el discurso "de un mundo que vibra, que está en movimiento y que desprende energía".
Proyección internacional
Chocarro también ha remarcado la singularidad de Puig y ha asegurado que se trata de un "de los creadores que tiene mayor proyección internacional en la actualidad", ya que sus obras han despertado "mucho interés en el mercado americano". Por último, Agustí Puig se ha descrito como un hombre de pocas palabras y ha puntualizado que "todo lo que tenía que decir, ya lo ha dicho pintando".