El Museo de Montserrat (MDM) vuelve a abrir sus puertas, una vez terminadas las obras de renovación de la climatización de todas las salas de la exposición permanente. Paralelamente, durante los dos meses y medio en los que ha estado cerrado también se han llevado a cabo mejoras para adecuar los nuevos espacios de debajo de la plaza de Santa Maria para la futura ampliación del propio museo.
Desde el sábado 18 de marzo ya se pueden volver a ver las diferentes colecciones de las que consta: la arqueología del oriente bíblico –con el fondo que adquirió el P. Bonaventura Ubach a principios del siglo XX durante sus viajes por Tierra Santa, Egipto, Siria e Irak con el fin de ilustrar la Biblia–, la orfebrería, la pintura antigua, la pintura y la escultura modernas –que incluyen una representación del impresionismo francés único en nuestro país , además de obras de Rusiñol, Casas, de los hermanos Vayreda y la escuela de Olot, entre otros muchos–, los iconos bizantivos y eslavos de la exposición Phos Hilaron , y la sección Nigra Sum , que contiene la iconografía de la Virgen de Montserrat.
Como novedades en la colección permanente: se vuelve a exponer la obra de Fortuny El vendedor de tapices, se ha incorporado un cuadro de un sensacional Tigre de Ramon Martí Alsina, dos tablas románicas del Retablo de Sant Blai, así como una Virgen románica restaurada recientemente. En la entrada, una escultura de Ricardo Vaccaro da la bienvenida a los visitantes.
El Museo de Montserrat, que fue declarado de interés nacional por la Generalidad de Cataluña, en 2006, está considerado como uno de los referentes museísticos nacionales. Recibe anualmente más de 100 mil visitantes. El museo del monasterio incrementa sus fondos, que alcanzan cerca de 4 mil objetos, con constantes donaciones de particulares y entidades privadas.