El pasado 16 de octubre, el Terracotta Museo de Cerámica reabrió sus puertas después de un mes y medio trabajando en la reforma de los 3000 m2 de tejado, la cual quedó muy dañada debido a la excepcional granizo del 30 d agosto. Durante toda la mañana se llevó a cabo una jornada de puertas abiertas, pero como gran acto principal de apertura, a las doce del mediodía, se inauguró la nueva exposición temporal de producción propia, una muestra que reivindica el orgullo de el trabajo bien hecho de los ceramistas de La Bisbal.
El acto de inauguración se complementó con la conferencia La alfarería tradicional de la Bisbal d'Empordà, a cargo de Alfons Romero i Vidal, historiador, ceramólogo y presidente de la Asociación Catalana de Cerámica, y se finalizó con una visita comentada a la exposición a cargo del comisario de la misma.
La nueva muestra temporal titulada Orgullo de alfarero presenta una selección de piezas cerámicas bisbalenses de entre mediados del siglo XVIII y principios del siglo XX. La mayor parte son piezas muy notables y de gran dificultad técnica que, una vez moldeadas, y ante su excepcionalidad, despertaron el orgullo del artesano que las hizo hasta el punto de querer dejar un testimonio impreso de la su trabajo. A diferencia de hoy, en ese momento firmar una pieza era un hecho totalmente insólito y extravagante, y sólo se explica por la voluntad de explicitar el sentimiento de la propia valía: el orgullo de hacer las cosas bien hechas por el gusto de hacerlas bien hechas.
Un total de treinta piezas que conforman la exposición, la mitad están firmadas por uno de los linajes alfareros más importantes de la historia de la cerámica bisbalense y, paradójicamente, uno de los más desconocidos: los Vicens. Se trata de una colección de piezas de entre 1749 y finales del siglo XIX con un altísimo valor patrimonial. Está formada por nueve jarras, dos aguamanes, una medida y una baldosa de medianería. De estas piezas, cuatro forman parte del fondo del Terracotta Museu, y el resto son piezas que nunca se habían expuesto hasta ahora y que el museo ha localizado en diferentes colecciones públicas y privadas.
El linaje de los Vicens destaca tanto por el alto número de alfareros y obradores que lo componen como por su extensión cronológica que se remonta a mediados del siglo XVIII y se alarga hasta el XX. Relatan una historia de casi doscientos años donde dos alcurnias de alfareros con este apellido se convirtieron en actores principales en el desarrollo y la consolidación de la cerámica de la Bisbal.
En cuanto al resto de piezas destaca una jarra de 1826 firmada por Pere Malagelada y otra de 1900 conmemorativa de la Unión Obrera de Alfareros, una cooperativa de producción creada en 1899 resultada de los movimientos obreros de la Bisbal d'Empordà y comarca . También hay un ámbito dedicado a la alfarería negra, donde destaca una pieza firmada y datada por Anton Marcó en 1816 –responsable de establecer el primer taller de barro negro de la Bisbal a finales del siglo XVIII–. Y finalmente, un ámbito dedicado a los pavimentos de ladrillo fino, una industria que nació a mediados del siglo XIX y que supuso una nueva forma de entender la producción cerámica, aplicando medios de producción, de organización del trabajo y de comercialización totalmente nuevos .
Estas baldosas presentan la marca de fábrica en relieve en el envés. La muestra se podrá visitar hasta el 23 de abril de 2023 en la Sala de Exposiciones temporales del Terracotta Museo de Cerámica de la Bisbal d'Empordà.
Primer encuentro de coleccionistas de cerámica antigua
Por otra parte, el 23 de octubre en los exteriores del Terracotta Museo de la Bisbal de Empordà se llevará a cabo el primer encuentro de coleccionistas de cerámica antigua Antiguo Cerámica, que Organizan la Asociación Catalana de Cerámica y el Terracotta Museo de la Bisbal de Empordà. Se trata de una propuesta abierta a todos donde poder encontrar todo tipo de cerámica antigua y de coleccionismo, piezas de todas las épocas y con un alto interés histórico que, si se desea, también se podrán adquirir. Habrá representación de la cerámica de la Bisbal, pero también de toda Cataluña y de toda la Península Ibérica.
Los horarios de visita al evento son de 10:00 a 14:00 horas de la mañana, y paralelamente se han programado diferentes actividades complementarias como puertas abiertas en el Museo, un taller de cerámica para niños, presentaciones de libros y una visita guiada a la exposición temporal Orgullo de alfarero.
También se realizarán dos presentaciones de libros, la primera será la de Jo también soy de barro, a cargo de la escritora y ceramista Núria Garcia Caldés. Se trata de una crónica del viaje que la autora hizo a Japón para conocer de cerca el arte Jômon, un estilo escultórico tradicional nipón de entre 14500 a. C. y el siglo IV a. Allí aprendió ese estilo de la mano del maestro Ifurai y se zambulló en las técnicas milenarias para trabajar el barro. Su perecedero terminó con una producción propia y la necesidad de escribir su experiencia. Por último, las actividades se cerrarán con la presentación del libro La cerámica de Cuenca, del ceramólogo catalán Emili Sempere. Se trata de una obra magna de 325 páginas, ilustradas con 210 fotografías, que esboza la historia de este oficio en Cuenca, desde la antigüedad hasta la actualidad. El libro, además de relatar la historia de la alfarería en la ciudad, también presenta las diferentes tipologías de piezas y hace un recorrido por sus ceramistas actuales. La obra se centra con especial interés en la figura de Pedro Mercedes (1921-2008), reconocido como uno de sus grandes ceramistas.